CLEVELAND,OHIO.-Cachorros de Chicago y los Indios de Cleveland hoy se deciden en ganar la Serie Mundial

Los 19.3 millones de televidentes en promedio que han presenciado la Serie Mundial desde sus casas, representan la mayor audiencia para este clásico evento desde 2004, cuando los Medias Rojas de Boston barrieron en cuatro partidos a los Cardenales de San Luis.

Y si esto ha estado ocurriendo con el duelo entre los Indios de Cleveland y los Cachorros de Chicago, se debe a varios factores según explicó a este medio el vicepresidente de Comunicaciones para Grandes Ligas, John Blundell.

Además, el número de televidentes que tuvo el quinto desafío celebrado el domingo en Chicago, unos 23.6 millones de espectadores, representaron un incremento de un 37% cuando se compara con los 17.2 millones que tuvo el quinto partido de la Serie Mundial de 2015 entre Kansas Citys y los Mets de Nueva York.

Si los Cachorros de Chicago y los Indios de Cleveland han tenido que esperar décadas por un campeonato, disputar un séptimo juego no está de más.

Addison Russell conectó un jonrón con las bases llenas en respaldo de Jake Arrieta para que los Cachorros derrotasen 9-3 a los Indios y llevasen al máximo esta Serie Mundial entre las franquicias con las sequías sin título más prolongadas en el béisbol de las Grandes Ligas.

Kris Bryant y Anthony Rizzo también sacudieron jonrones dentro de un ataque de 13 hits de Chicago.

El jonrón de Bryant encendió un racimo de tres carreras en el primer inning, marcando la tónica. El batazo de Russell en el tercero, el primer grand slam en una Clásico de Otoño desde 2005, alejó a los Cachorros, que por segundo juego seguido evitaron la eliminación y el miércoles intentarán atrapar su primer campeonato desde 1908.

Por segundo partido consecutivo, y pese a una ventaja de cinco carreras, el relevista cubano Aroldis Chapman debió entrar en el séptimo, esta vez para sacar cuatro outs en vez de ocho.

De ganar, Chicago podría convertirse en el séptimo club que en la historia de la Serie Mundial que se corona tras remontar un 3-1 en contra y el primero que lo consigue fuera de casa desde que los Piratas de Pittsburgh superaron a los Orioles de Baltimore en 1979.