En un movimiento inesperado, la Agencia de Inmigración y Aduanas (ICE, por sus siglas en inglés) recapturó a inmigrantes indocumentados, quienes habían sido liberados en las pasadas semanas como resultado de la reducción de presupuesto en esa entidad federal.

El ICE emitió un comunicado que indica que al menos "28 de los liberados por razones presupuestarias han sido detenidos de nuevo por violar los términos de supervisión", indicó el sitio de Internet de Univision.com.

Las autoridades migratorias insistieron que "continuarán revisando los términos de liberación para cada invididuo como práctica de rutina y reconsiderará las condiciones cuando sea necesario".

Un importante número de políticos republicanos han criticado la decisión de la liberación de los inmigrantes indocumentados, pues aseguran que también han salido de prisión algunos que son realmente "criminales peligrosos".

Incluso algunos alegan que esta decisión de la administración Obama es una manera de dramatizar su oposición a los recortes federales que entraron en vigencia el pasado 1 de marzo, indicó el periódico The New York Times.

En las pasadas tres semanas alrededor de 2, 228 inmigrantes han sido liberados de diferentes centros de detención a lo largo del país.

Muchos de los inmigrantes liberados se mantenían en los centro de detención y el délito que habían cometido era una infracción de tránsito menor, que derivó en un arresto por no tener un estatus migratorio definido.

De acuerdo con las últimas estadísticas publicadas por el ICE el proceso de deportación acelerada (Expedited Removal) resulta en una orden final de deportación, que prohíbe que esos extranjeros vuelvan a ingresar a Estados Unidos por un período de por lo menos cinco años, a no ser que tengan un permiso especial.

En el año fiscal 2005, la Patrulla Fronteriza detuvo a 18,050 extranjeros como parte del proceso de deportación acelerada.

Los inmigrantes estaban en prisiones de Arizona, California, Georgia y Texas.