Pese a que en todo momento intentó ocultarse del ojo público, ayer durante su arribo a Los Ángeles la cantante Cindy Lauper fue fotografiada con el rostro totalmente enrojecido y cubierto de heridas, aparentemente producto de un tratamiento a la piel al que se habría sometido.Al reparar en los flashes que lanzaban los paparazzis, Lauper, de 57 años, solo atinó a taparse la cara con parte de sus prendas de vestir al tiempo que abandonaba raudamente el terminal aéreo.

La prensa norteamericana especula que quien encumbrara en la década de los ochenta el tema “Girls just want to have fun”, busca tener un rostro más lozano y ha pasado por una sesión de ‘peeling químico’ con miras a la entrega de los premios Grammy, donde ha sido nominada en la categoría de Mejor Album Tradicional de Blues por su álbum “Menphis Blues”.