
La catedral, que contiene pinturas de los siglos XVII y XVIII, ha sufrido daños "ingentes", y las fotos tomadas desde el aire muestran que una parte del techo y de una de las naves laterales se ha venido abajo.
También se ha derrumbado una zona del transepto de Santa María di Collemaggio, basílica edificada en 1287 por Pietro da Morrone, quien después sería el Papa Celestino V y que sobrevivió a varios terremotos sufridos por L' Aquila.
Las obras que datan de la dominación española sobre la ciudad -que fue parte del Reino de Nápoles de 1527 a 1738- han sido asimismo parcialmente destruidos por el sismo.
Parte de la Puerta de Nápoles, construida en 1548 en honor de Carlos V, se ha caído, mientras que la Fortaleza Española, un imponente castillo en la parte más alta de la ciudad, ha registrado "ingentes derrumbamientos" en el tercer piso.
Se han venido abajo la cúpula de San Agustín, una de las iglesias más importantes del barroco en Los Abruzos, al igual que el campanario de la iglesia de San Bernardino, que databa de 1525
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