La llegada del huracán Tomas a Haití provocó este viernes el comienzo de deslaves de tierra en el sur del país, donde además volaron techos, mientras en la capital se inundó un campo de desplazados, informaron medios locales y agencias de socorro.

Un campamento de Puerto Príncipe situado cerca del antiguo palacio presidencial, donde viven varios miles de desplazados tras el sismo del 12 de enero, tenía los pies en el agua en la mañana del viernes, anunció Vision 2000, una radio de Puerto Príncipe.

En la capital no ha dejado de llover desde la noche del jueves, constató un periodista de la AFP. Los habitantes de Puerto Príncipe intentaban el viernes proteger sus casas fijando chapas sobre los techos.

En Pétion-ville, en el norte de Puerto Príncipe, los habitantes cortaban ramas de árboles que podrían resultar peligrosas.


Durante la noche del jueves al viernes, el Centro Nacional de Huracanes de Estados Unidos (NHC) hizo subir la categoría de Tomas de tormenta tropical a huracán, tras la aceleración de sus vientos.

El ojo del huracán pasaba “muy cerca de la península suroeste de Haití”, dijo el NHC, mientras se teme que los vientos e intensas lluvias del ciclón agraven el desastre en este país, que vive una grave situación humanitaria por el catastrófico sismo de enero y una epidemia de cólera.

En Puerto Príncipe la ONU evacuó a una parte de los 1,3 millones de personas sin techo que viven en campos de desplazados tras el sismo del 12 de enero, que dejó 250.000 muertos.