Redacción
BBC Mundo
El presidente interino de Honduras, Roberto Micheletti, levantó el estado de excepción, a la vez que anunció que serán "castigados" los responsables de haber sacado del país al mandatario Manuel Zelaya, quien fue depuesto el 28 de junio a través de un golpe de Estado.

"Hemos derogado en el Consejo de Ministros el decreto (…) queda derogado completamente", dijo Micheletti en alusión a la restricción de las libertades de expresión, circulación y reunión, que tenía una vigencia prevista de 45 días.

En la misma rueda de prensa se refirió a la decisión de sacar a Zelaya de Honduras y llevarlo a Costa Rica: "definitivamente es una decisión que tomaron algunos sectores que van a ser castigados de conformidad con la ley".

Aunque evitó identificar a los responsables de aquella medida, dijo estar "totalmente seguro que serán llevados a los tribunales, como corresponde a cualquier error que se haya cometido".

Esperan nuevo aire
La suspensión de las garantías constitucionales –que fue derogada este lunes– permitió sacar del aire a Radio Globo y Canal 36, ambos críticos al golpe de Estado y cercanos a quienes exigen la restitución del mandatario depuesto.

La decisión adoptada este lunes fue "tomada con agrado" por el periodista David Romero, director de Radio Globo.

Romero le dijo a BBC Mundo que "todo esto obedece a una presión internacional y toda una presión interna que también ha habido para derogar este decreto que ha causado mucho daño".

Por el momento la radio se puede escuchar en internet, mientras esperan que el levantamiento del estado de excepción sea publicado en La Gaceta oficial.

"Tenemos un equipo adicional que nos va a permitir salir al aire", anunció Romero, quien recordó que el transmisor principal "sigue en poder de la policía".

"Nuestros abogados fueron y les dijeron que el equipo estaba en poder de la Dirección de Investigación Criminal, que lo están analizando. Nosotros no sabemos qué le pueden analizar a un equipo de radiotransmisión", afirmó Romero.

Visita Republicana

Mientras tanto se encuentra en Tegucigalpa una misión del Congreso estadounidense, encabezada por la representante de Florida, Ileana Ros-Lehtinen, la republicana de mayor rango en el Comité de Asuntos Exteriores, quien acompañó a Micheletti en la rueda de prensa donde se anunció la derogación del cuestionado decreto.

Los también republicanos de Florida, Mario y Lincoln Díaz-Balart integran la comitiva. Los tres se cuentan entre quienes han apoyado lo que definen como la legalidad de la salida de Zelaya del poder.

"Espero personalmente escuchar sobre los desafíos que está enfrentando el gobierno de Micheletti como resultado del corte de ayuda hecho por la equivocada política de Estados Unidos que quiere imponer a Zelaya pese a que haya violado la constitución hondureña", se lee en un comunicado de la oficina de Ros-Lehtinen.

Es la segunda visita de parlamentarios estadounidenses que recibe Micheletti en menos de una semana, después de que el viernes se entrevistara con un grupo de parlamentarios republicanos en la casa presidencial.

Los republicanos han cuestionado el respaldo que le ha dado el presidente Barack Obama al mandatario depuesto y el que haya cortado varios programas de cooperación binacional.
"No es oficial"

La canciller del gabinete de Zelaya, Patricia Rodas, aseguró en entrevista con el corresponsal de BBC Mundo en Washington, Carlos Chirinos, que estos encuentros no "legitiman" a las autoridades hondureñas, ni generan divisiones en la política exterior estadounidense.

"No es una misión oficial del parlamento ni del gobierno estadounidense (…) Recuerde que ellos van como partidarios de una idea, como miembros de una partido político que es afín al de los golpistas", dijo Rodas.

Para este miércoles, en tanto, se espera la llegada de una misión de la Organización de Estados Americanos (OEA), integrada por cancilleres y funcionarios diplomáticos de una decena de países.

La comitiva intentará reabrir los canales de negociación entre el gobierno interino, encabezado por Micheletti, y el mandatario depuesto, quien se encuentra en la Embajada de Brasil desde el pasado 21 de septiembre cuando regresó sorpresivamente al país.