Por: Bolívar BalcacerEs innegable que Luis Jiménez no ha podido salir del laberinto en el que se encuentra después de su aislamiento del vacilon de la mañana la obra que él mismo vendió por la Mega 97.9 F.M. de la ciudad de New York.
El locutor mezcla de prepotencia y egolatría quedó barrido en el espacio tiempo al pasar un año sin tener un contacto directo con la comunidad que un día le rindió pleitesía y degustó de sus excentricidades en el referido programa.
Hoy cuando ha retornado a New York por medio a la emisora La Kalle 105.9 no ha podido despegar por varias razones, la primera es que no tiene un equipo real que le siga los pasos, por lo que es notorio el desajuste en la producción muy a pesar del emporio que le apoya y la otra es que el publico no sabe realmente cual es el original si Juan Carlos Alonzo o él, Juan Carlos que pasa a ser una especie de Clon de Luis se lo ha comido como un “pato se come una lombríz de tierra”, y tenía que ser así, el mach entre ellos viene de tiempos pasados cuando supuestamente Luis puso "cáscaras" sobre el camino de Juan Carlos para sacarlo de Mega, lo que aprovechó este para al retorno demostrar que podía demoler el mito y de hecho lo ha logrado.
No podemos negar que la mega es una adicción genérica, cuando a usted le preguntan fuera de New York cual es la emisora hispana que más se escucha, de forma automática y sin pensarlo dice La mega, es como New York todos quieren venir a la gran babel de hierro porque el nombre ha roto las praderas del tiempo y es una meca que todos persiguen hasta para tomarse una foto en la gran ciudad. Seguir Leyendo:>>"AQUI"<<
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