
El ciudadano colombiano identificado como Rubén Darío desapareció en abril de 2007 sin dejar rastro. Su cuerpo, reducido al esqueleto, apareció más de un año después dentro de una maleta en un paraje de la localidad de Mijas, en Málaga, al sur del país.
La policía explicó el miércoles en un comunicado que hay tres personas supuestamente implicadas en el crimen. Dos se encuentran ya en prisión por otros delitos relacionados con el tráfico de estupefacientes y una tercera fue detenida recientemente en Valencia.
Tras más de un año de investigación, los agentes determinaron que los tres sospechosos acudieron al domicilio del fallecido, cerca de Málaga, para adquirir un kilo de cocaína.
En un momento de la transacción, que tuvo lugar en abril de 2007, los compradores decidieron disparar a Rubén Darío, quedándose con la droga y el dinero. A continuación, siempre según el relato policial, limpiaron la escena del crimen y se deshicieron del cadáver escondiéndolo en una maleta.Los restos aparecieron el 12 de noviembre de 2008 en un terreno escarpado.
En el domicilio del último de los arrestados, los investigadores encontraron tres armas, aunque todavía no se sabe si se cometió el asesinato con una de ellas.
Las fuerzas de seguridad también investigan ahora la relación de alguno de los detenidos con otros crímenes similares
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