Los componentes de "Orquesta de la Luz" interpretan casi todas sus canciones en español, con un cierto deje latinoamericano, y logran animar con palmas al tímido público japonés en sus conciertos de esta semana en el Cotton Club de Tokio.
A principios de los años 80, once músicos japoneses que amaban la salsa decidieron unirse para tocar los ritmos calientes latinos y así nació "Orquesta de la Luz".
Tras unos inicios exitosos en los clubes tokiotas de Shibuya y Roppongi en 1984, Nora decidió lanzarse al mercado americano y con una maqueta de su grupo llegó a Nueva York, donde le dieron la oportunidad de actuar por primera vez en 1989.
A partir de ahí, todo fue rodado y en 1990 grabaron su primer álbum, "De la luz. Salsa caliente del Japón", que recibió un Disco de Oro y fue número uno durante 11 semanas consecutivas en la lista Billboard de música latina.
Desde entonces la banda dio conciertos en Estados Unidos, América Latina y Europa, fue nominada a los Grammy con su "Tropical Latin Album" y en 1993 la ONU le otorgó la medalla de la Paz.
Sin embargo "Orquesta de la Luz" decidió en 1997 disolverse para que cada uno de sus componentes desarrollase su carrera por separado y desde entonces sólo se unían en ocasiones especiales, como cuando en 2002 actuaron en el Festival de Música para la Paz Mundial.
En julio de 2004, no obstante, decidieron volver a la carga y lanzaron un nuevo disco, "Banzaaay!", nueve años después de su último álbum, por lo que desde entonces retomaron las actuaciones en vivo, uno de sus fuertes.
Ahora Nora y el resto de componentes de la "Orquesta de la Luz" miran el futuro con la intención de "expresar nuestra salsa para los japoneses", porque "esta música no tiene fronteras y por eso queremos viajar por todo el mundo".
"Ahora vamos a grabar un disco y queremos hacer una gira por Estados Unidos, Sudamérica y Europa, pero por el momento tenemos todavía muchos conciertos que dar en Japón", explicó Nora en la entrevista con Efe.
"Orquesta de la Luz" dará en los próximos meses conciertos en las ciudades japonesas de Osaka, Fukuoka y Hiroshima, antes de viajar el próximo verano a Seúl.
Las influencias musicales de este grupo -Gipsy Kings, Celia Cruz, Héctor Lavoe, Benny Moré o Johnny Pacheco, algunas de cuyas canciones versionan- se dejan notar sobre el escenario, donde, si hay suerte, el público nipón acompaña con las palmas.
